Nunca subestimes la importancia de las fuentes de alimentación; son el eje de estabilidad de todo el sistema de vigilancia. Realmente se trata de servicio y ganancias, algo que no puede pasar por alto. Hoy, volvemos a examinar los peligros para dejar claro un punto: los suministros de energía, aunque diminutos, tienen implicaciones de gran alcance para los medios de vida. Esta información es imprescindible y es hora de revelar los aspectos menos conocidos.

¿A qué se debe este énfasis constante en los suministros de energía? Porque en el ferozmente competitivo mercado de seguridad actual, las guerras de precios han pasado a ocupar un lugar central como principal medio de competencia. Desafortunadamente, los vendedores poco éticos recurren a atajos y utilizan productos falsificados para engañar a los consumidores. Esta situación también está muy extendida en el mercado de suministro de energía para cámaras de vigilancia. Dos culpables comunes de los suministros de energía deficientes para las cámaras de vigilancia incluyen el reciclaje de componentes electrónicos desechados y los recortes en los materiales. Los peligros de estos suministros inferiores son múltiples:

**1. Clasificaciones de potencia engañosas**

Este es el fenómeno más frecuente. Actualmente, muchas fuentes de alimentación para cámaras de vigilancia están etiquetadas como 2A, pero su salida real puede ser tan baja como 1A o incluso menos. Algunas de estas fuentes de alimentación de calidad inferior experimentan una disminución significativa de la producción de energía con el tiempo debido al uso de componentes de calidad inferior o recuperados.

Impacto en las cámaras: las repercusiones para las cámaras incluyen fluctuación de la imagen, ausencia de color o imagen y mala visión nocturna. En casos graves, es posible que las cámaras no se inicien, especialmente cuando las luces infrarrojas se activan por la noche. Para determinar el valor de salida real, se puede evaluar la situación de carga de la cámara y medir el voltaje y la corriente en la interfaz de alimentación.

**2. Medidas de protección insuficientes**

Numerosas fuentes de alimentación para cámaras de vigilancia de mala calidad carecen de características de diseño estándar, como mecanismos de protección contra sobrecarga y sobrecalentamiento, y algunas incluso omiten la protección con fusibles.

Consecuencias negativas: Este descuido podría provocar que la cámara se queme o, en casos extremos, que la fuente de alimentación emita humo o provoque incendios.

**3. Filtrado inadecuado, interferencia de imagen**

Actualmente, el mercado ofrece fuentes de alimentación para cámaras de vigilancia económicas o irrazonables con placas de circuito que generalmente carecen de inductores o filtros de modo común.

Efectos en el monitoreo: Los efectos subóptimos en la calidad del monitoreo incluyen interferencias en la señal de video. En condiciones de poca luz, como durante la noche, estas interferencias onduladas son especialmente pronunciadas.

**4. Cables de entrada y salida de calidad inferior**

Las fuentes de alimentación de mala calidad suelen utilizar cables de entrada y salida delgados y, a veces, incluso emplean materiales inferiores como acero revestido de aluminio.

Efectos perjudiciales: con el tiempo, estos cables pueden provocar una salida de energía inadecuada. Las fundas de los cables pueden agrietarse, especialmente en invierno, y pueden producirse roturas de cables, lo que altera el funcionamiento normal de las cámaras de vigilancia.

**5. Uso de carcasas de plástico inferiores**

La carcasa externa de una fuente de alimentación juega un papel fundamental en la protección contra daños físicos y riesgos eléctricos. Algunos fabricantes sin escrúpulos optan por carcasas de plástico baratas y de calidad inferior que pueden decolorarse o agrietarse con un uso prolongado, especialmente en entornos exteriores.

Peligros: la entrada de agua podría provocar daños leves o, en casos graves, provocar fallos en el suministro eléctrico, daños a la cámara o incluso riesgos eléctricos.

Las fuentes de alimentación de calidad inferior conllevan diversos riesgos innecesarios y posibles fallos. Es posible que algunos de estos no presenten problemas obvios inicialmente, pero pueden desarrollar numerosas fallas después de un uso prolongado, causando los daños antes mencionados a los sistemas de vigilancia y pérdidas financieras o de reputación innecesarias para los compradores. A pesar de que algunos proveedores poco éticos ofrecen garantías o servicios de reemplazo, su responsabilidad solo se extiende al suministro de energía en sí, excluyendo las pérdidas económicas secundarias debido a estos componentes deficientes.

En vista de esto, es crucial que los compradores examinen minuciosamente las fuentes de alimentación de las cámaras de vigilancia. Opte por la calidad sobre el precio y evalúe minuciosamente el diseño del circuito de la fuente de alimentación elegida. Marcas como OHWOAI brindan soluciones confiables que priorizan la calidad y la confiabilidad sobre los precios bajos. Al final, invertir en un suministro de energía confiable salvaguarda todo el ecosistema de vigilancia.